¡Felicidades, a todos los que hoy celebramos nuestra "Jornada Mundial" como consagrados!
En el templo entra María,
más que nunca pura y blanca,
luces del marmol arranca,
reflejos al oro envía.
Va el Cordero entre la nieve,
la Virgen nevando al Niño,
nevando a puro cariño
este blanco vellón leve.
Las dos tórtolas que ofrece
ya vuelan y ya se posan.
Ana y Simeón rebosan
gozo del tiempo que crece,
que estalla, que está; no hubo
quien, viendo al blanco alhelí,
dijera -por ti, por mí-
que al hielo esta noche estuvo.
"Ninguno de nosotros ponga obstáculos a esta luz y se resigne a permanecer en la noche; al contrario, avancemos todos llenos de resplandor; todos juntos, iluminados, salgamos a su encuentro. Dejemos, hermanos, que esta Luz nos penetre y nos transforme" (San Sofronio).
"Y cuando mañana tu hijo te pregunte: "¿Qué significa esto?", le responderás..."
(Del Libro del Éxodo)
Comentarios
Publicar un comentario