“La luz de nuestra lámpara encendida…”
“¡Oh divino Amor! ¿Quién podrá decir lo que pasa
en aquel divino silencio en que Tú, Señor, pones al alma
para que te entienda sin ruido?”
Madre María-Antonia de Jesús
En este tiempo de celda, después del rosario, la que lo desea puede leer o escribir, hacer más oración; es una hora que pasa demasiado a prisa... El alma se deja envolver por la dulce Presencia del Amado. Él está aquí, no se le ve, ¡pero se le adivina!...
Comentarios
Publicar un comentario